La Novena a la Virgen de la Merced es una gran oportunidad para orar, especialmente ante situaciones de cautividad, propias o de alguien por quien deseamos pedir.
Este año proponemos una Novena para aprender a ser libres para amar. Nos damos cuenta de que la Santísima Virgen María fue especialmente libre para amar, ya que superó todas esas barreras que detienen a la mayoría de seres humanos lejos del Amor de Dios y del Amor de los seres humanos.
Con María, pues, queremos aprender cómo ser verdaderamente libres del egoísmo, del miedo, del resentimiento,... para poder vivir la vida con verdadero amor.
Que María nuestra Madre de la Merced nos conceda esta inmensa libertad interior que sólo Cristo Jesús puede generar en el corazón humano. ¡Que así sea!
Oración final a María de la Merced
(para cada día de la Novena)
Madre Nuestra de la Merced, (para cada día de la Novena)
entregada al Amor del Padre y del Hijo,
disponible a la fuerza del Espíritu Santo,
comprometida como madre amorosa
de tus hijos que están cautivos,
acudimos a ti para pedir
la libertad en Cristo.
Te pedimos especialmente
…..... (petición personal),
Y llenos de esperanza,
seguimos a tu Hijo
que nos hace libres
de las cadenas del egoísmo,
para vivir con un solo corazón
como redentores, hermanos y amigos.
Por Jesucristo, tu Hijo bendito,
Amén.
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