Desde el día 22 en la
tarde empezaron a llegar a la Grita
frailes y amigos de Fr. Juan Alfonzo Duque entre ellos podemos señalar a
los siguientes: P. Fernando Ruiz y los estudiantes de Votos simples, Fr. Ender
Montoya y su familia, Fr. Bladimir y Flia, Fr. Yván Echeverría y Flia, y amigos
provenientes de Caracas, de nuestras comunidades del Tirso de Molina y de la
Parroquia San Ramón Nonato de los frailes de Catia, hermanos provenientes de
Maracaibo, de San Juan de los Morros, las madres de los religiosos fr.
Felix Chirinos y Fr. Héctor Flores y
los Postulantes. Fuimos atendidos realmente de maravilla y cada uno pudo dormir
en sus respectivas posadas desde un inicio se notó la organización de este
evento. Monseñor Ulises Antonio Gutierrez Reyes también en compañía del Padre
José Castaño descansaron esa noche en la
ciudad de la Grita para estar listos al día siguiente para celebrar y
alegrarnos en la ordenación presbiteral del Diácono Fr. Juan Alfonso
Duque.
La noche del viernes
a las 6 de la tarde se ofreció en las instalaciones de la Basílica, en la casa
cural la cena para los que viajaban de lejos, luego se realizó un homenaje a Fr.
Juan en el templo mayor de la Basílica del Espíritu Santo, santuario del Santo
Cristo de la Grita. En este evento estuvo presente la orquesta infantil, juvenil
de la Grita que nos deleitó con innumerables piezas criollas y Danzas la Grita
un grupo de niñas que danzaron diferentes bailes de la Zona; hubo una pequeña
presentación de parte de Fr. Richard Godoy quien hizo tres de sus Reggaetones y
cantó el hermano Francisco del Grupo Sangre y Agua unas piezas para orar por el
futuro sacerdote mercedario. Fr. Juan Duque aprovechó para agradecer a todos los
que habían tenido alguna influencia en su proceso vocacional. Después de esto se
realizó un pequeño ensayo de la ceremonia y cada uno se dirigió a sus
respectivos hospedajes.
Dia
23 de Junio.
Después del desayuno
pautado para las 8:00 de la mañana, nos dirigimos a casa materna de Fr. Juan
Alfonso para buscarlo, su casa está
ubicada en el Barrio Fátima y la
vereda que conduce a su casa vestía de lujo por la ordenación de uno de sus
habitantes. De allí hemos ido en procesión a partir de las 9:20 cantando y
alabando al Señor por el evento que se realizaría a las 10:00 de la mañana en la
Basílica del Espíritu Santo, Santuario del Cristo de los Milagros de la Grita,
nos acompañó la banda del Ejército Nacional, asistieron a este evento los
frailes, familiares, vecinos y amigos provenientes de diferentes regiones,
Maracaibo, San Juan de los Morros, Catia, San Bernardino y la Grita. Los Padres
Mercedarios que asistieron a este primer evento fueron los R.R. José Cataño,
Richard Godoy, Ponc Capell, Fernando Ruiz y los estudiantes de Votos simples:
Fr. Bladimir Pérez, Fr. Yvan Echeverría y Alejandro Rincón (postulante), los Padres Néstor Burgos, Saúl Benavides, los diáconos
Fr. Félix Chirinos O. d. M y Jesús Romero y el P. Héctor Flores junto a los postulantes del Seminario Mercedario San
Pedro Nolasco de Palmira. 
La celebración
pautada para las 10:00 tuvo sus inicios en la sacristía en donde el maestro de
ceremonias Fr. Ender Castillo dio las instrucciones a todos en referencia a lo
que a cada cual le correspondía realizar. Iniciada la procesión de entrada desde
la sacristía hacia la iglesia, saliendo por la puerta lateral y se hizo el recorrida de la plaza al frente de la
iglesia. Nos acompañaron los sacerdotes diocesanos de la zona, los principales
concelebrantes han sido el párroco del Santuario Basílica del Espíritu Santo P.
Nepomuceno (de cumpleaños ese día ) y el P. Fernando Ruiz.
Muy significativos
han sido los testimonios de la Lic.
Carmen Zambrano y la Lic. Teresa Duque quienes conocen a Fr. Juan Alfonso y dan testimonio de que es
digno de recibir el ministerio sacerdotal, luego el P. Fernando Ruiz, presentó
al diácono a Monseñor Ulises Antonio Gutiérrez Reyes, Arzobispo de la Diócesis
de Ciudad Bolívar
Monseñor Ulises
en su homilía enfatizó la misión y el servicio del sacerdote, y destacó lo
importante para la familia mercedaria el significado de este evento maravilloso;
una cosa bien importante que señaló
Monseñor Ulises es lo siguiente: El sacerdote representa a Cristo y es un hombre
de Dios, hombre de fe, de comunidad, hombre que está en constante renovación de
su ministerio. Después de la imposición de manos y de la
unción, el neo sacerdote revestido por
el P. Néstor Burgos y ayudado por el P. Saúl Benavides, recibe el cáliz y la
patena presentada por sus padrinos de mano de Monseñor. Continuada la
celebración y después de la comunión, el joven sacerdote realizó su acción de
gracias a Dios por haber recibido este don, un don para el servicio en el ministerio
sacerdotal, agradeció entre lágrimas a su madre Francisca Suarez y recordó
momentos vividos en su proceso de crecimiento en la fe y en la vocación.
Otro momento significativo ha
sido cuando Monseñor ata con una cinta las manos ungidas de fr. Juan Alfonso y
su madre es llamada para que las desate.
Monseñor antes de
finalizar la Eucaristía envió al Padre Juan a dar la primera bendición a su
madre la Sra. Francisca, a sus hermanos Keila y Killiam y a toda su familia,
después de recibir la bendición materna.
Después de la
bendición se realizó el besa manos. Y
nos dirigimos al Colegio Santa Rosa de Lima perteneciente a las hermanas
Dominicas donde se realizó el almuerzo con familiares, amigos y feligreses de
nuestras parroquias que asistieron a la Ordenación sacerdotal.
Es de notar la buena
organización del evento y también el clima de fraternidad y alegría que se vivió
sobre todo la alegría de sus padres, familiares y amigos.
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